Me siento encerrada, sin posibilidad de descubrir el cielo, incapaz de ver el arco iris, sin saber soñar. En una cárcel sin celdas, en una cárcel sin protección, mi propia cárcel mental. Mi subconsciente me retiene en una pausa intelectual. Imágenes borrosas y horripilantes, no lo podré contar. Visualizo guerras, peleas, insultos, asesinatos, muerte.
No lo podré arreglar pero agarrémonos a los garrotes y empecemos a escalar a un mundo sin mal.
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